1º) Muchas de las causas de los problemas que sufrimos ahora mismo hunden sus raíces en las malas prácticas del pasado:
- Una administración municipal que ha venido gastando irresponsablemente durante mucho tiempo recursos que no tenía, dejando finalmente al pueblo al borde de la quiebra total.
- Un partido que ha gobernado sin apenas contrapeso durante más de treinta años seguidos, creando una especie de costumbre o régimen en el que eran demasiado frecuentes las actitudes prepotentes, el desprecio de la oposición y el favoritismo y enchufismo para con sus adeptos e incondicionales.
- Una población-ciudadanía que no hemos participado ni nos hemos preocupado lo suficiente por conocer a fondo e intervenir en la mejora de la gestión de los asuntos del municipio.
2º) Aunque en la anterior etapa se ha creado una nómina sobredimensionada que es difícil mantener porque consume una fracción demasiado elevada del presupuesto; aunque todo el mundo comprende que en la actual situación es inevitable reestructurar en alguna medida la plantilla… no podemos estar en absoluto de acuerdo con las formas de actuar en la ejecución de los despidos:
- Porque se ha incumplido la promesa hecha por la actual alcaldesa antes de las elecciones, promesa que nos pareció y nos sigue pareciendo que contenía el criterio más justo y acertado para abordar este problema (nos remitimos a la reunión mantenida con el Foro Social el 4 de mayo último). Ella aseguró en aquella ocasión que sólo se procedería a reducir la plantilla después de hacer dos auditorías, una económica y otra de personal, con las que se aclararía el número de puestos que se pueden mantener, cuáles son los servicios o trabajos que se pueden considerar prescindibles, o los que no son sostenibles porque no tienen tarea suficiente, de cuáles no se puede prescindir porque supondría una merma de servicios inasumible para el pueblo, etc.. Después de estas auditorías se dilucidarían los puestos a suprimir —prometió—, y solo al final del procedimiento aparecerían los nombres de las personas afectadas. Pues bien, no se ha actuado así, no hemos conocido que haya habido tales auditorías, y más bien, lamentablemente, todo parece indicar que los nombres propios han sido lo primero que se ha considerado a la hora de formalizar los boletos de despido. Nos parecen totalmente rechazables esos procedimientos.
- Porque, además, se han ejecutado los despidos sin contar con los trabajadores, con sus órganos legítimos de representación (como es el comité de empresa); se ha actuado con precipitación, con muy malas formas: teniendo a todo el mundo acojonado, dejando caer los despidos con cuentagotas, anunciándolos con antelación pero dejando un tiempo de suspense por medio, comunicándoselo a los afectados por medios totalmente despersonalizados y sin ninguna posibilidad de diálogo. Creemos que los propios trabajadores y el comité de empresa habrían podido comprender y aceptar ciertos recortes siempre que hubiesen sido consensuados, teniendo en cuenta todas las posibilidades y puntos de vista (se sabe, por ejemplo, que el comité propuso un ERE temporal como alternativa, pero fue rechazado de plano). El acuerdo tenía que haber sido posible, porque en verdad todo el mundo está convencido de que es inevitable reducir de alguna manera la plantilla actual. Pero no se ha querido hacer así. Lamentablemente, da toda la impresión de que se ha realizado con criterios políticos, dejándose llevar por las opiniones más radicales del partido ahora gobernante, que argumentan cínicamente que es justo hacer ahora desde este bando lo mismo que se hizo antes desde el otro. ¡Pero esto sería absolutamente mezquino y rechazable! ¿Y hasta cuándo tendríamos que seguir así, atrapados en esa rotación encanallada…?
- Por último (pero no es lo menos importante), parte estos despidos no se ajustan a derecho: se les deben salarios, no se les realiza finiquito, y las indemnizaciones que les corresponden no las van cobrar en largo tiempo, si es que las cobran… Una institución pública no puede dar ese ejemplo de desdén por los derechos laborales.
3º) Respecto a la situación de impago a los trabajadores municipales, no podemos hacer menos que solidarizarnos totalmente con ellos, y exigir que se les pague sin más demora. No es justo ni soportable, esas familias tienen que cobrar, y respirar. Apoyamos todas las acciones reivindicativas que están convocando, como es el caso de todas las concentraciones y manifestaciones que llevan realizadas, o incluso la huelga que tienen anunciada para el día 17 de octubre. Y sería hermoso que todo el pueblo, más allá de divisiones cicateras y absurdas, apoyara unido masivamente a estos servidores públicos y vecinos nuestros en la defensa de una causa totalmente justificada, demostrado una vez más lo que tantas veces ha puesto Valverde de manifiesto: su espléndido sentido de la solidaridad.
4º) Pensamos que dada la situación económica tan extraordinaria a la que se ha llegado (que se podría calificar casi de catastrófica), todas las administraciones públicas deben ayudar a superarla (y por supuesto, facilitar las medidas necesarias todos los partidos y grupos políticos, sociales y económicos que tengan algún poder o influencia). Ayudar no solo a este ayuntamiento sino a todos, porque los pueblos no se pueden quedar sumidos en el caos administrativo y de servicios. Hay que poner el contador económico a cero entre todos los que tienen responsabilidades y competencias en el asunto, porque entre todos se han generado de alguna manera los problemas (¿no se rescata a los bancos, que han hecho las cosas todavía peor?). Y luego ya, a partir de ahí, dejar que cada gobierno municipal empiece a ejercer su responsabilidad con los sistemas que crea más adecuados. Y los ciudadanos juzgaremos.
5º) Por último: no creemos que lo que vamos a decir a continuación sea solo cuestión que afecte a un partido político, sino que es un asunto de interés general, por eso nos aventuramos a expresarlo. El PSOE tiene que hacer una profunda autocrítica, y la debe dar a conocer al público en general de la manera que estime más adecuada. Porque en esta ocasión se ha visto con claridad que a todos nos pueden afectar severamente las buenas o malas prácticas de los grupos políticos que administran nuestros intereses. Todos los partidos en general (porque el sistema hace agua por muchos sitios), pero este especialmente en este caso, visto lo sucedido en Valverde, debe regenerarse sinceramente y en profundidad, para que pueda ejercer cuanto antes una oposición firme y digna que, junto con los otros grupos políticos a los que ahora no les corresponde gobernar, sirva de sano contrapeso al poder, y constituir para el futuro una alternativa más, capaz de generar de nuevo ilusión, confianza y seguridad. Un pueblo no puede permitirse el lujo de prescindir de ninguna de sus energías positivas.
EN LOS TIEMPOS DIFÍCILES LO QUE SE NECESITA ES ALTURA DE MIRAS Y GENEROSIDAD; LO QUE PUEDE HUNDIRNOS DEL TODO EN LA MISERIA ES LA ESTRECHEZ DEL ENTENDIMIENTO Y EL TRIUNFO DE LA MEZQUINDAD.
Foro social de Valverde, 26 de septiembre de 2011
VALVERDE DEL CAMINO es lo suficietemente rico en escritura y una muestra de ello, este documento comunicado, que nos trae la mas sensata realidad de nuestro pueblo.Un grupo de personas que desinteresadamente, muestran su versión sin cortapisas ni devociones a unos y a otros, que no pretenden mas que llenar de cordura una situación de división que ya en su día, también fue bastante motivo para el desastre de este país y que con estas actuaciones en nuestro PUEBLO,tornan a tintes de venganzas lejanas.
Así pues,no puedo mas que hacer alarde de este escrito y decir al FORO SOCIAL,que me siento totalmente identificado en vuestro comunicado y personalmente darle las gracias.SALUDOS.